RECHAZO POPULAR ANTE VISITAS IMPERIALES DURANTE ASUNCIÓN PRESIDENCIAL BOLIVIANA

Nov 1, 2025

La Internacional Antifascista – Capítulo Bolivia denunció la presencia de delegaciones extranjeras alineadas con Washington y Tel Aviv, calificando su llegada como una amenaza directa a la soberanía nacional y la autodeterminación del país.


La organización Internacional Antifascista – Capítulo Bolivia emitió un comunicado contundente en el que expresa su rechazo a las visitas oficiales previstas para el acto de posesión del nuevo gobierno de Rodrigo Paz Pereira, el próximo 8 de noviembre. En su pronunciamiento, el colectivo denuncia la llegada de delegaciones extranjeras encabezadas por altos representantes de Estados Unidos, Israel, Argentina y El Salvador, a quienes acusa de promover políticas contrarias a los intereses de los pueblos latinoamericanos.

El pronunciamiento comienza con una crítica severa a la delegación estadounidense, encabezada por el secretario de Estado Marco Rubio, a quien la organización considera “enemigo declarado de los pueblos libres de América Latina”. Según la declaración, la visita del alto funcionario no representa un gesto diplomático, sino una estrategia para consolidar el control geopolítico de Washington sobre Bolivia y asegurar la subordinación del nuevo gobierno a los intereses del Departamento de Estado.

Asimismo, la Internacional Antifascista condena la presencia de una delegación israelí, calificándola como “genocida” y recordando que la reapertura de relaciones con el régimen sionista sería un agravio a la memoria de las víctimas palestinas y una traición a la tradición solidaria del pueblo boliviano. La organización sostiene que tal acercamiento convertiría al país en “cómplice de la ocupación y de los crímenes cometidos en Medio Oriente”.

El documento también repudia la asistencia del presidente salvadoreño Nayib Bukele, acusándolo de utilizar sus cárceles como “negocios privados” donde se violan los derechos humanos de miles de personas. Su modelo de seguridad, sostiene la organización, “sirve de laboratorio al nuevo fascismo internacional, aplaudido por Washington y las potencias aliadas”.

En el mismo tono, la agrupación rechaza la presencia del mandatario argentino Javier Milei, a quien responsabiliza por la aplicación de políticas “antipopulares y represivas” que, según el comunicado, han desmantelado derechos laborales históricos y entregado la soberanía económica de su país al Fondo Monetario Internacional. Para la organización, Milei representa “la sumisión total al imperialismo y la traición a la Patria Grande”.

Otro de los puntos más críticos del pronunciamiento se centra en el posible retorno de agencias extranjeras, como la DEA, a territorio boliviano. La Internacional Antifascista advierte que el ingreso de estas entidades “constituye una amenaza directa a la soberanía nacional”, al considerarlas responsables de operaciones encubiertas que favorecen el tráfico internacional de drogas y la desestabilización política de la región.

Finalmente, la organización denuncia lo que considera una “traición histórica” hacia Cuba y Venezuela, recordando los programas de alfabetización y salud impulsados por ambos países en Bolivia. La ruptura con esos gobiernos, señalan, significa “criminalizar la solidaridad y desconocer los lazos de hermandad entre pueblos”.