El evento central contó con la presencia de la Reina carnavalera, Bringhela I, quien deslumbró con su carisma y elegancia en un majestuoso carro alegórico.
Trinidad, se vistió de fiesta con la llegada del Carnaval del Bicentenario, una celebración que reunió a miles de trinitarios y visitantes en el emblemático Cambódromo.
La emoción y la alegría llenaron el ambiente en un evento donde la tradición, la música y el color fueron los protagonistas de la jornada.
Desde días previos, la ciudad de Trinidad se preparó con una serie de actividades que marcaron el inicio de esta festividad.
Se realizaron las coronaciones de la reina del carnaval Bringhela I, la reina infantil, la reina de antaño, la reina inclusiva.
El evento central contó con la presencia de la Reina carnavalera, Bringhela I, quien deslumbró con su carisma y elegancia en un majestuoso carro alegórico que recorrió el Cambódromo, acompañada por comparsas que con su alegría y colorido hicieron vibrar al público presente.
Las coreografías, vestimentas y la creatividad en los carros alegóricos destacaron el ingenio y la identidad cultural de los trinitarios, reafirmando la riqueza del carnaval beniano.
El desfile también contó con la participación de grupos folclóricos, bandas musicales y danzas tradicionales, fusionando lo moderno con lo ancestral en una muestra de la diversidad cultural de la región.
Durante la jornada, la seguridad estuvo garantizada por un operativo especial, permitiendo que los asistentes disfrutaran con tranquilidad de esta festividad única.
El Carnaval del Bicentenario en Trinidad no solo representa una celebración de identidad y tradición, sino que también fortalece el turismo y la economía local, con la llegada de visitantes que se suman a la alegría del pueblo beniano.
