A través de una carta dirigida a las autoridades del regimiento, los padres informaron que sus hijo fueron golpeados y extorsionados por el sargento instructor.
Padres de familia de dos conscriptos del Regimiento de Infantería 19 “Capitán Echeverría” han denunciado malos tratos y abuso por parte del Sargento Segundo Mus. Cristian Freddy Paredes Quispe, PMP, en la localidad de Casarabe.
A través de una carta dirigida a las autoridades del regimiento, los padres informaron que sus hijos han sido golpeados y chicoteados con cables cuando no se someten a las órdenes del sargento instructor. Además, denunciaron que el militar habría extorsionado a los conscriptos, exigiéndoles el pago de 50 bolivianos para permitirles salir de franco (día libre).
Ante estos hechos, los progenitores están solicitando la destitución del suboficial y anunciaron que acudirán a la Fiscalía y la Policía para formalizar la denuncia por estos presuntos ilícitos. La situación ha generado gran preocupación entre las familias de los conscriptos, quienes exigen una pronta intervención de las autoridades competentes.
Defensoría del Pueblo hace seguimiento y pide sanciones
La Defensoría del Pueblo informó que realiza un seguimiento detallado al caso de agresiones contra un grupo de soldados en el departamento de Beni, a través de su Delegación Departamental Defensorial.
Según los reportes, de las ocho víctimas, solo cinco han sido valoradas por el médico forense. Sin embargo, uno de los afectados no dio su consentimiento para la evaluación, mientras que los otros dos soldados serían menores de edad, y hasta el momento no han recibido valoración médica especializada.
Ante esta situación, la Defensoría del Pueblo gestiona la intervención de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia (DNA), con el objetivo de garantizar la atención y protección de los conscriptos menores de edad involucrados en el caso.
El caso ha generado preocupación en diversos sectores, y se espera que las autoridades correspondientes actúen con celeridad para esclarecer los hechos y brindar el apoyo necesario a las víctimas.
La Defensoría reiteró su compromiso de velar por los derechos humanos de los afectados y de continuar con el monitoreo del proceso para garantizar justicia y protección a los soldados agredidos.
