Beijing reafirmó su respaldo a La Habana y pidió a Washington poner fin al bloqueo impuesto desde hace más de seis décadas, tras la nueva votación en Naciones Unidas.
El Gobierno chino instó este viernes a Estados Unidos a levantar de manera inmediata el bloqueo económico y las sanciones que mantiene sobre Cuba desde hace más de 60 años. La declaración fue realizada por el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Guo Jiakun, luego de que la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobara nuevamente, por amplia mayoría, una resolución que condena esas medidas unilaterales.
La votación, realizada el jueves, reflejó una vez más el respaldo internacional a la causa cubana: 165 países se pronunciaron a favor de poner fin al bloqueo, mientras solo siete votaron en contra y doce se abstuvieron. Para el Gobierno chino, el resultado confirma que la comunidad internacional rechaza la política de sanciones impuesta por Washington y apoya el derecho de Cuba a decidir libremente su destino.
Durante una conferencia de prensa en Beijing, Guo Jiakun subrayó que el prolongado embargo estadounidense ha causado “profundo sufrimiento al pueblo cubano”, al obstaculizar el acceso a recursos básicos, medicinas y oportunidades de desarrollo. “El bloqueo brutal que dura más de seis décadas representa una violación del derecho internacional y una ofensa a los principios de equidad y justicia”, señaló el portavoz.
China, que ha votado en contra del bloqueo desde 1992, reafirmó su postura de apoyo constante a La Habana. Jiakun destacó que su país “se mantiene firme en la defensa de la justicia internacional” y que seguirá acompañando a Cuba en su lucha contra la injerencia extranjera y en la búsqueda de un modelo de desarrollo propio, ajustado a sus condiciones nacionales.
El funcionario también expresó que la votación en Naciones Unidas constituye “una muestra clara del aislamiento del unilateralismo y de la impopularidad de la intimidación”. Enfatizó que las sanciones unilaterales, además de ser ilegítimas, representan una carga injusta para los pueblos, por lo que China llama a Estados Unidos a “escuchar el clamor de la comunidad internacional y rectificar su política hacia la isla caribeña”.
Por su parte, el Gobierno cubano celebró la resolución como una victoria diplomática y moral. Desde hace más de tres décadas, La Habana presenta anualmente ante la ONU el proyecto que exige el levantamiento del bloqueo, obteniendo un respaldo casi unánime del organismo internacional.
El voto de esta semana refuerza, según analistas, la tendencia de apoyo global a Cuba frente a las medidas coercitivas impuestas por Washington desde 1960, año en que se estableció formalmente el embargo. Con este nuevo pronunciamiento, la Asamblea General vuelve a dejar constancia de la oposición mundial a una política que, para la mayoría de los Estados miembros, resulta incompatible con los principios de soberanía, autodeterminación y respeto mutuo entre las naciones.
